Desde hace algún tiempo
mis palabras
chocan contra tu muro de silenciono
son absorbidas en tu silencio
Te vengo demandando escucha y respuestas
lo que te pido
es
que no dejes caer al suelo
el hilo de mis pensamientosy anhelosinquietuddeseo
que me ayudes
a seguir pensando
que me reflejes
para saber que existo
más allá de la habitación de mi cuerpo
¿Es tuyo el poema, Casilda? Me gusta mucho y me levanta ecos de CARTOGRAFIAS DEL SILENCIO, de Adrienne Rich, especialmente la primera estrofa.
ResponderEliminarMe parece muy interesante psicoanalíticamente lo que se dice en él: ese buscar un reflejo de uno mismo en otro. Tiene un toque de narcisismo y desamparo a la vez que todos compartimos. Pero no deberíamos necesitar a alguien que nos refleje o nos autorice o nos defina, para sentir que existimos. "Y esta es mi aflicción" dices al final, y eso es de una dolorosa lucidez. Y me conmueve.
Perdona, mi última intención es parecer pedante.
Un beso.
Te escucho.
ResponderEliminarGracias a los dos, Marisol y JG, y también a los que no responden a la demanda, que es mía y de todos los que transitamos por redes de cualquier tipo.
ResponderEliminarNinguna respuesta o silencio es pedante, no hay que pedir perdón.
No es un poema, es una reflexión sobre la soledad en nuestra palabra aún no pronunciada, que dice según va configurándose como habla. Es psicoanalítico, viene del interior y así se expresa.
Es un SOS y un palabras hacia
Es precioso.
ResponderEliminarSi, necesitamos ese reflejo para existir, necesitamos que nos recuerden para no morir y cuanto mas tiempo permanezcamos en la memoria de otros, cuando ya no nadie pueda reflejarnos, mas inmortales seremos. Amargo consuelo es ese para quien en vida no tiene quien le refleje.
laincultadetuhermana