Andan cubriendo los suelos de plazas, calles y jardines, caídas de los árboles y llevadas por el viento de un sito a otro
y son tan hermosas y sorprendentes y tan inútiles
No vocean ni discuten ni ocupan primeros planos ni se quejan
no salen en los medios de comunicación
ni dan la lata a nadie con sus problemas y sus soluciones
Quizá sean un antídoto psíquico, un descanso de tanta confrontación, de tanta desazón
por esta maldita crisis que todo lo ocupa
y son gratis, y no valen,
y son tan hermosas y sorprendentes y tan inútiles
Tan lindas
ResponderEliminarYo sí las aprecio.
ResponderEliminarTan frágiles, tan bellas pero inútiles por qué?
ResponderEliminarTiene la utilidad de ser bellas, de dar color a nuestros paseos y de darnos alivio.
Nos alivian porque nos permiten pensar que hay cosas que no cuestan nada.
laincultadetuhermana
Inútiles porque económicamente no valen en esta sociedad. Útiles para vivir más al mirarlas y pensar en ellas, claro que alivian.
ResponderEliminarY JG sí las aprecia y lo sé.
Gracias a los tres
debe de ser bello ser inútil económicamente y alimentar el alma de una forma tan directa
ResponderEliminarComo las obras de arte ¿no?,en especial las que no "valen".
ResponderEliminar:) de hecho las contemplé así, sin establecer una frontera entre la belleza natural y la "artificial". en la intención de quien mira y presenta el "objeto" hallado está la magia con la que el diletante se admira (me parece que me he ido a dar con Duchamp)... de otro modo no habría llegado a disfrutar estas cosas que nadie quiere en el plano material. otras sí, pero no éstas. gracias. un abrazo.
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